Junta Directiva del Banco de la República presenta Informe al Congreso
- La inflación al consumidor terminó el año en 4,5%, en el punto medio del rango meta definido por la Junta Directiva y por debajo del nivel que alcanzó en diciembre de 2005 (4,9%). Se completan así, tres años consecutivos de cumplimiento estricto de las metas de inflación establecidas por el Banco.
- La reducción de la inflación en 2006 tuvo lugar al tiempo con una aceleración del crecimiento del producto. El crecimiento en la economía colombiana en 2006 se ubicó en 6,8%, desempeño que no se observaba desde 1978 y que sitúa a Colombia dentro de los países de mayor crecimiento en América Latina.
- Con el propósito de garantizar el máximo crecimiento de la economía colombiana, coherente con el cumplimiento de las metas de inflación, la Junta Directiva ha venido aumentando de manera gradual las tasas de interés, para reducir el estímulo monetario que la economía ya no requiere.
- El contexto económico favorable de rápido crecimiento y reducción de la inflación ha estado acompañado por una progresiva apreciación del peso, en parte explicada por la mayor confianza de los empresarios extranjeros y nacionales para invertir en el país. Dada la agudización de las presiones hacia la apreciación del peso en el primer trimestre de 2007, el Banco ha venido interviniendo masivamente en el mercado cambiario con compras que entre enero y febrero alcanzaron los US$ 2.024,5 millones.
Bogotá, D.C.- En diciembre de 2006 la inflación al consumidor se situó en 4,5%, por debajo de la inflación de 2005 (4,9%) y dentro del rango meta para el año, el cual fue fijado por la Junta Directiva entre 4% y 5%. Así, se completan tres años consecutivos de cumplimiento riguroso de las metas fijadas. En los primeros meses del presente año se ha presentado una tendencia ascendente de la inflación anual, hasta alcanzar en febrero un nivel de 5.25%. Este comportamiento parcialmente se explica por el crecimiento de los precios de los alimentos y los regulados, para los cuales se espera una reducción de su ritmo de crecimiento en el segundo semestre del año.
En el caso de los bienes no transables, las presiones inflacionarias observadas recientemente podrían continuar, dado el fuerte crecimiento de la demanda. Por el contrario, para los bienes transables se espera una relativa estabilidad con una inflación probable del 2,0%.
El crecimiento del año 2006, desde el punto de vista de la oferta, tuvo origen en numerosos sectores económicos, principalmente la industria, la construcción, el comercio y el transporte. Desde el punto de vista de la demanda, los componentes que más contribuyeron fueron la inversión y el consumo de los hogares. Estas características del crecimiento permiten ser optimistas sobre su continuidad, dada la amplia base productiva en la que se origina y el incremento del producto potencial de la economía. Adicionalmente, el dinamismo del consumo refleja una consolidación de la confianza que permite esperar que este componente de demanda continúe siendo dinámico en el futuro.
En vista de la aceleración de la demanda agregada y de la probabilidad de que pudiera llegar a desbordar la capacidad productiva de la economía, la Junta Directiva ha venido aumentando sus tasas de interés de intervención entre abril de 2006 y marzo de 2007 en nueve oportunidades, en 25 puntos base cada una. Con el último incremento el pasado 23 de marzo, la tasa base para las subastas de expansión quedó en 8,25%. Esta política contribuye al cumplimiento de la meta de inflación en 2007 y a su convergencia hacia la meta de largo plazo, definida como un rango entre 2% y 4%.
Este ambiente económico favorable, de rápido crecimiento y reducción de la inflación, ha estado acompañado por una progresiva apreciación del peso. Esto último ha sido en parte resultado de la mayor confianza de los empresarios extranjeros y nacionales para invertir en el país. Igualmente está asociado con los elevados precios de los principales bienes de exportación, con los desequilibrios de la economía estadounidense y la excesiva liquidez en los mercados internacionales. Para moderar la tendencia a la apreciación, el Banco ha realizado intervenciones esterilizadas en el mercado cambiario.
Para lograr un crecimiento sostenible, es indispensable reducir los riesgos internos que pueden derivarse de una excesiva expansión de la demanda frente a la capacidad productiva de la economía. De no enfrentarse oportunamente, podrían surgir presiones inflacionarias y un déficit de la cuenta corriente que podría tornarse insostenible. El incremento de las tasas de interés que ha venido haciendo la Junta Directiva ayuda a controlar esta situación al moderar el ritmo del crecimiento del gasto. Con este mismo propósito se requiere de una política de austeridad fiscal, que acompañe de forma coherente la política monetaria de tal forma que contribuya a la estabilidad del crecimiento económico y a la reducción de las presiones hacia la apreciación del peso.
En el frente externo, los riesgos podrían provenir de choques negativos a los términos de intercambio o a los mercados de capital. La acumulación importante de reservas que se ha venido llevando a cabo constituye un seguro que protege a la economía de los efectos negativos que se derivarían de tales choques.
Con respecto a la situación financiera del Banco, las utilidades durante el 2006 fueron de $1.624 miles de millones (mm), como resultado de ingresos por $2.730 mm y egresos por $1.106 mm. Frente a 2005, las utilidades fueron superiores en $1.299 mm, gracias a mayores ingresos por $1.556 mm. Para 2007 se proyectan utilidades de $1.288 mm, inferiores en $335,9 mm a las observadas en 2006. Esto se explica, principalmente, por menores ingresos recibidos por rendimientos de las reservas internacionales y por mayores egresos de intereses pagados sobre el canje en cuentas de depósito y sobre los depósitos del gobierno nacional.
Bogotá, Marzo 30 de 2007 (11:21 a.m.)