Informe sobre Inflación - Junio de 2006

Tenga en cuenta

La Constitución Política de Colombia y el artículo 14 de la Ley 31 de 1992 asignan al Banco de la República la función de administrar las reservas internacionales. Las opiniones y posibles errores son responsabilidad exclusiva del autor y sus contenidos no comprometen al Banco de la República ni a su Junta Directiva.

Autor o Editor
Gerencia Técnica
Vargas-Herrera, Hernando
Subgerencia de Estudios Económicos
Toro-Córdoba, Jorge Hernán
Departamento de programación e inflación
Ramírez-Cortés, Juan Mauricio
Sección de Inflación
Cobo-Serna, Adolfo León
Reyes-González, Alejandro
Velasco-Martínez, Andrés Mauricio
Caicedo-García, Edgar
González-Molano, Eliana Rocío
Torres-Trespalacios, José Luis
Hernández, Juan Nicolás
Charry-Velásquez, Luisa Fernanda
Flórez, Luz Adriana

En el Informe sobre Inflación, el equipo técnico del Banco presenta un análisis sobre la economía y la situación inflacionaria y sus perspectivas en el mediano y largo plazo y, con base en él, hace una recomendación a la Junta Directiva sobre la postura de la política monetaria.

Fecha de publicación

En junio la inflación al consumidor se redujo levemente ubicándose en 3,9%, principalmente por la caída en la inflación de alimentos. Durante el segundo trimestre la reducción de la inflación al consumidor se explica por factores de oferta: la caída en los precios de varios alimentos perecederos y la reducción de la inflación de regulados. Aunque el tipo de cambio subió desde abril, esto todavía no se refleja plenamente en el índice de precios al consumidor (IPC). Usualmente, la depreciación afecta la inflación al consumidor al cabo de tres meses, por lo que sólo a partir de julio se comenzarían a ver sus efectos; sin embargo, ya se ha observado un aumento de la inflación al productor que, de persistir, implicaría presiones de costos. De otro lado, la inflación de no transables sin alimentos ni regulados permanece estable desde hace un año, lo cual sugiere que el crecimiento de la demanda no se ha reflejado en mayores presiones inflacionarias, o que éstas han sido neutralizadas por expectativas de inflación decrecientes y alineadas con la meta de inflación para 2006 y con el rango en el cual se definiría la meta para 2007.