Reporte de Mercados Financieros - Primer trimestre de 2022
El primer trimestre de 2022 se caracterizó por la continuación de las presiones inflacionarias a nivel global, las cuales se vieron acentuadas por el aumento de los precios de los commodities tras la invasión de Rusia a Ucrania. En este contexto, la mayoría de los bancos centrales continuó retirando el estímulo monetario adoptado durante la pandemia lo cual llevó a un aumento de las tasas de interés, así como en las tasas de los títulos de deuda. Por otra parte, el aumento de los casos de COVID-19 en China y las medidas adoptadas por sus autoridades para contener la pandemia, junto con eventos idiosincráticos generaron una alta incertidumbre la cual se vio reflejada en una mayor aversión al riesgo a nivel internacional. Por su parte, el dólar estadounidense se fortaleció frente a la mayoría de las monedas de países desarrollados y algunas de las monedas de emergentes mientras que los mercados accionarios presentaron en su mayoría un comportamiento negativo.
En cuanto a los activos latinoamericanos, estos se vieron favorecidos por los mejores términos de intercambio, producto del aumento de los precios de los commodities, así como por la lejanía geográfica y comercial del conflicto en Ucrania. La mayoría de las tasas de cambio de los países de la región se apreciaron. El peso colombiano no fue la excepción y se apreció, dinámica que estuvo respaldada además por los precios del petróleo y algunos factores idiosincráticos. En cuanto a los títulos de deuda pública a nivel local, estos se desvalorizaron en línea con lo observado en los títulos de los demás países de la región, reflejando el aplanamiento de la curva de Tesoros en EE. UU. No obstante, las desvalorizaciones en el tramo largo de las curvas estuvieron contendías por las compras significativas que realizaron los inversionistas extranjeros durante el trimestre. Por otra parte, los CDS y los EMBI de Colombia presentaron reducciones, asociadas principalmente con los mejores términos de intercambio producto del aumento de los precios del petróleo y el carbón, y la lejanía de Latinoamérica del conflicto en Ucrania. A esto se sumaron las mejores perspectivas de crecimiento económico ante la continuidad de los índices de confianza empresarial en niveles elevados, la publicación de cifras de actividad económica que sorprendieron al mercado durante la mayor parte del trimestre, y los resultados de las últimas encuestas presidenciales, las cuales muestran un empate técnico entre los dos candidatos principales. No obstante, la confianza del consumidor presentó un deterioro importante. Durante este trimestre la Junta Directiva del Banco de la República (JDBR) aumentó su tasa de interés en 200 pb (de 3,00% a 5,00%) ante el aumento de las presiones inflacionarias. En este periodo la tasa IBR overnight, así como la tasa interbancaria, se ubicaron en promedio por encima de la tasa de referencia.